Se toma dos
vasos de agua y se lleva uno extra, al salir de la cocina ve por una ventana
que la calle esta oscura, apaga la luz y en el segundo piso suena la puerta del
baño una vez mas, conoce su sonido pues es la única que chirrea o hace ruido.
-Que bien,
ahora a alistarme para el regaño. Decide no encender la luz para no enfrentarse
a su mamá, sube las escaleras y observa que la puerta de la habitación de su
madre esta abierta pero la luz se encuentra apagada, camina lento hacia su
cuarto, una vez dentro coloca el vaso en la mesa de noche para liberar su mano
y cierra con sumo cuidado toma la manija de la puerta y acto seguida la cierra.
Enciende el
monitor y se dispone a acostarse, entonces oye la puerta del baño nuevamente,
se queda escuchando y ve por debajo de la puerta como alguien viene hacia su
cuarto lo sabe porque la luz de la luna alumbra el pasillo, ese alguien mueve
la manija de su puerta y suena también la puerta del cuarto de su madre.
Él ya no
soporta mas y enciende la luz, esta muy asustado, no entiende lo que esta
pasando, todo es muy confuso, su madre estaba molesta, muy molesta o algo
estaba mal, ella no actúa así, ella lo hubiese llamado, ¿Qué pasa entonces?
Ella siempre enciende la luz, Jhon decide entonces llamarla.
Gritó muy
fuerte: ¡¡Ma!! ¡¡Mamá!! ¡Ma! ¿Eres tu?. No hubo respuesta, no obstante la
puerta del baño volvió a sonar. ¡Ma! Volvió a clamar Jhon esta vez sollozando.
La luz del pasillo es encendida y escucha la voz de su madre.
-¿Qué pasa
Jhon? -Pregunta su madre a la vez que toca la puerta. -¿Qué sucede hijo?.
Ella abre,
entra y lo encuentra temblando, muy pálido a punto de entrar en shock.
-¿Qué
ocurre hijito? Dime ¿Qué tienes?
-Nada ma,
solo que me asustaste.
-¿Como? Yo
no he hecho nada amor.
-Si, pues
sales a cada rato al baño y pensé que me ibas a regañar.
-Amor,
desde que nos acostamos alas 9 no me he levantado.
Jhon se
acobarda , cierra la puerta y le dice:
-¡Hay alguien
en la casa! Hay alguien, sentí pasos, la luz del baño se encendió varias veces,
y también ha sonado la puerta.
-Jajaja no
seas bobito, crees que un ladrón va a hacer todo eso, jajaja ¡No!
-Pero Ma.
Además el peluche que patee estaba en la nevera, acomodado perfectamente encima
de ella. Yo lo pise y luego lo lancé a la cocina, al suelo de la cocina ¿Cómo
llego a allá arriba? –Le explicó con lujo de detalles.
-No temas
mi hombrecito, vamos a la cocina.
No puedo
decir si esta fue una buena o mala idea, solo diré que antes de que ellos
siquiera abrieran la puerta del cuarto, sonó nuevamente la del baño.
-No abras
Ma ¿Escuchas?
-Ha de haber quedado abierta, no temas, vamos a la
cocina.Continuara....
siga! la historia
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